De la Vega se ha hecho unos retoques en el

bigote y otras tirillas, afectada por la obcecación del PP de no arrimar el hombro en la caída por el despeñadero económico, político y social de nuestro psicopático amito ZP. Es que sólo se preocupan por llegar al poder, mientras que nosotros estamos comprometidos con España. Son como lapas, como víboras, como hienas en su múltiples depredaciones e hipocresías. Por ejemplo, mienten más que hablan, tienen una lengua bífida, proceden del más rancio franquismo, sus padres fueron delegados franquistas de trabajo, premiados por el dictador asesino que besaba a sus hijos, mamaron violencia y dictadura, procuran estar siempre cerca del poder, exhiben varios modelitos de alta costura cada día para dar envidia a la famélica legión, accedieron a los cargos por enchufe y los administran al margen de la ley con marrullerías y otros delitos; incapaces de superar una carrera dignamente o una oposición, se adjudican puestos que luego reciclan para siempre y si no, se acogen al cuarto turno. Son unos corruptos, quieren más y más, odian a España y a Cataluña por eso no les quiere nadie. Hay que huir de ellos como de la peste. ¿Cómo queréis que no se me arrugue la piel si me machacan el alma en la que no creo?