El coraje y la pena de Wert.

Cuando se hace la vista gorda sobre el estado de derecho, se incumplen las leyes y la Constitución puede ser atropellada impunemente, con el consentimiento del gran componedor Rajoy, es previsible todo lo que va a ocurrir.  Los socialistas que debían haber desaparecido sólo por su fatuo tratamiento de la educación en España, disparatado, corrupto y reaccionario, se alzan, como siempre, queriendo salvar al mundo hacia el fracaso final. Los nacionalistas, pagados por constituyentes engañados, se alzan a inflar el disparate de su arrogancia en beneficio de sus apriscos... Wert, qué pena de coraje para una democracia acobardada.