Algunos advirtieron a Bengalas de su atrevimiento y riesgo de faltar al respeto, insultar o criminalizar a ciertos personajes de la vida pública. La realidad escuece. No podemos blandear ni adoptar las posturas, incluso incómodas, de la avestruz, en plan colaboracionista. La realidad es demoledora -y eso sometidos a una legalidad y administración de justicia tan precarias-. Con el poder irritante e irritado de una realidad atropellada antes que de una función profética, BENGALAS ha ido denunciando a mangantes y cínicos que han contribuido a la corrupción destructora de nuestra convivencia... Todavía funciona la justicia...¡Albricias! Blesa, al trullo. Que conste, como consta en estas BENGALAS, que primero habría empezado con MAFO, después por Hernández Moltó, por Narcís Serra, el pianista de Caixa Catalunya... y por los sindicalistas impávidos de tanta cueva de ladrones.
Malo sería que el yacimiento de estafadores, malversadores y ladrones en las cúpulas de las Cajas, de cuya existencia vienen bramando amargados los contribuyentes, quedara en su indiciario ápice, echado a perder por una mala instrucción con peor literatura del magistrado Elpidio José Silva Pacheco. El Consejo General del Poder Judicial no puede permitir la exhibición de un disparate que pueda reforzar la impunidad de los poderosos gracias a incompetentes o graciosos.
Malo sería que el yacimiento de estafadores, malversadores y ladrones en las cúpulas de las Cajas, de cuya existencia vienen bramando amargados los contribuyentes, quedara en su indiciario ápice, echado a perder por una mala instrucción con peor literatura del magistrado Elpidio José Silva Pacheco. El Consejo General del Poder Judicial no puede permitir la exhibición de un disparate que pueda reforzar la impunidad de los poderosos gracias a incompetentes o graciosos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario