lunes, 27 de octubre de 2008

Los nacionalistas canarios quieren más poder sobre

las brumas de San Borondón. Están bien ricos los que nos prometían la identidad canaria con un vaso vino, una carne con papas y medios de comunicación y propaganda machacando; ahora quieren ser estado con derecho a decidir, bilateralidad y mandar más. Estos ignoran que quien manda soy yo como constituyente y les he dejado demasiado carrete, seducido por su cercanía y sus promesas. Estos desconocen que la crisis económica que padecemos, con un tercio de la ciudadanía bajo el nivel de la pobreza, está previamente agusanada por la miseria moral de quienes nos quieren continuar tratando como ganado, mientras carroñean nuestra desgracia e ingenuidad presentándose como salvadores de una opresión, macerada descaradamente y que saben manejar muy bien ocultando su expolio y administrando nuestras emociones. A éstos les va a salir el tiro por la culata porque formo parte de una nación abierta gracias a la constitución por lo que en España (deseo que en todo el mundo también) soy de todas partes porque soy ciudadano. Así que lo que exijo es el reconocimiento de nuestra ciudadanía como hombres libres e iguales. Todo lo demás es exclusión, estafa y latrocinio. Imperio de la ley para hombres libres e iguales que mis sentimientos y emociones los administro yo.

1 comentario:

P Vélez dijo...

Fantastico, 'Mis sentimientos los administro yo'!!