que les hago caso, están muy equivocados... por mucho que la economía y mis subvenciones mendicantes les continúen embraveciendo más, que tornadizos intelectuales se añadan al matonismo independentista, que armen cadenas y ruidos varios hasta en la Muralla China, que hasta los charnegos se enmascaren con la estelada, no les hago ni caso porque a mí me importan un pito esas algaradas anticonstitucionales... porque son eso, anticonstitucionales. Oyes, la ley es la ley.
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