nacionalismo corrompido y corruptor. "El 25 de julio de 2014 cambió la historia de Cataluña. Contra todo pronóstico, el padre del nacionalismo catalán contemporáneo, Jordi Pujol Soley, hacía público un comunicado en el que confesaba que durante los últimos 34 años -lo que incluía los 23 en que fue presidente de la Generalitat- había ocultado al fisco en el extranjero una fortuna de dudosa procedencia. Hasta entonces, Pujol gozaba de una imagen envidiable en el mundo del catalanismo. Era el referente. Aquella confesión lo cambió todo. Un año después el pujolismo es sinónimo y ejemplo de corrupción. Pero las consecuencias no terminan en la caída de un falso ídolo, sino que han ido mucho más allá". (CRÓNICA GLOBAL)
1 comentario:
¿Y este viejo porqué no está encarcelado? ¿Es que no robó bastante con sus hijos y esposa,merde?Mac
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