sábado, 15 de julio de 2017

¿Permitir que los hijos cambien de sexo?

Algunos se creen que no hay nada más moderno ni avanzado que permitir que los hijos cambien de sexo sin contar con los padres; y que el colmo del progreso es que el Estado se haga cargo de la diversidad sexual de esos “pobres” niños, amenazada por la intransigencia y cerrazón de sus progenitores.    Lo irónico del caso es que eso tan progre, tan avanzado y tan democrático que defienden las leyes de adoctrinamiento LGTB de 11 comunidades autónomas o la ley mordaza LGTB de Podemos es un invento patentado por regímenes que no eran precisamente progres, avanzados ni democráticos...  Usurpar la patria potestad vulnerando el derecho de los padres a la educación de los hijos es lo que hizo la Rusia estalanista con los jóvenes Pioneros, capaces de delatar a sus progenitores como hizo Pavel Morozov que denunció al suyo por traidor; o la Alemania nazi en la que los niños entraban a los 10 años en el ‘Jungvolk’ (Pueblo Joven) y a los 14 años pasaban a las ‘Hitlerjügend’ (Juventudes Hitlerianas)... y si algún padre se le ocurría invocar el derecho a la educación ya te puedes imaginar dónde terminaba. (Actual/Brief)

1 comentario:

Anónimo dijo...

Probando