El asunto pinta bastante feo. Un sacerdote italiano, trabajador de la Nunciatura de la Santa Sede en Estados Unidos, es pillado consumiendo pornografía infantil. El departamento de estado de Estados Unidos advierte al Vaticano, y le pide que levante la inmunidad diplomática, ya que el delito ha sido cometido en suelo americano. La respuesta del Vaticano tarda 3 días en llegar y decepciona al funcionario americano que la recibe: "No". El Vaticano deniega la petición del gobierno americano y se lleva a Carlo Alberto Capella a Roma. Actualmente, el sacerdote se encuentra a la espera de juicio en el palacio de los penitenciarios, a pocos metros de la Domus Sancta Martha donde vive Francisco. Puedes leer la información completa aquí.
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