martes, 8 de octubre de 2013

Rajoy echa a volar a Sánchez Camacho, sin plumas y

 cacareando, para ver si da una alternativa al independentismo catalán con su idea de un régimen fiscal a la carta (financiación asimétrica) y contentar a los catalanistas, ignorando que se iban a carcajear de ella y que los sociatas, perdidos, sentirían un aliento para defender el disparate, inconsistente y anticonstitucional revenido, de compensar ordenadamente a las "Comunidades" que más ponen a la caja común.
Ya en el artículo 339 de la Constitución de Cádiz (1812) se decía: " "Las contribuciones se repartirán entre todos los españoles en proporción a sus facultades, sin excepción ni privilegio alguno". Es decir, por razón de justicia social entre todos los constituyentes. No existe ninguna otra razón. Menos, la que esgrime el nacionalismo catalán, la de que "Espanya ens roba". Lo peor es que, como se sabe, quienes se lo acaban llevando crudo son las mesnadas endogámicas de Jordi Pujol.
Vamos, Alicia, Rajoy, en las nubes, acojonados y haciendo el ridículo. 

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