EN EL MISMO instante en el que yo caiga rendido aprovecharán para ponerse uno encima del otro y hacer cosas que, honestamente, preferiría que no hicieran”, ha anunciado Rubén Sanchís, de seis años, que tiene la intención de permanecer despierto todo el tiempo posible. El niño ha explicado a la prensa que no puede permitirse el lujo de cerrar los ojos “un segundo” y que sus padres, que ya le han ordenado ponerse el pijama, parecen muy interesados en conseguir que se duerma. “Debo ser fuerte y luchar contra el sueño”, ha insistido Sanchís, que no se irá a dormir hasta asegurarse de que es el último que queda despierto. “Me despisté un día y ahora tengo un hermano que me roba los juguetes, no es ninguna tontería”, defiende.
1 comentario:
No había oído nunca algo parecido pero no me resulta nada extraño del todo.Ese niño de seis años está adelantado en lo que le causará problemas.No sé cómo empezó esa ocurrencia suya y también falta saber porqué aparecieron los periodistas en su corta vida.
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