martes, 10 de febrero de 2015

Oiga, Señor... Es que tiene una ristra de papel que

va arrastrando pegada a su zapato... (con un evidente ridículo).
- No tengo dinero, contesta desabrido.
- Señor, lleva pegado a su zapato un largo papel...
- Ah, perdone. Estoy harto de que me pidan dinero.
- Gracias a Dios, no lo necesito. Usted lo pase bien.
(Se quedó confundido, ya sin la ristra que arrastraba en su zapato).

No hay comentarios: