la democracia y promover la corrupción y la impunidad. La Fiscalía Anticorrupción se queja de que, a pesar de su creciente carga de trabajo y de la complejidad de los asuntos que aborda, está “anclada en la prehistoria en el apartado de las nuevas tecnologías” y funciona gracias a “aplicaciones caseras” confeccionadas por los propios funcionarios.
No hay comentarios:
Publicar un comentario