efecto ZP, sorprende a la OTAN con otra astracanada made in ZP. La niña de Felipe tiene como primo (Zumosolín) a ZP y se pirra por cualquier golpe efectista y espectacular, ridiculizando hasta la pena la acción militar (más avergonzada en cuanto representa al glorioso ejército del pueblo prolongado desde Viriato y los Tercios, a la de Aragón y la de Malasaña), con el despreciable símbolo de las gallinas. Jugar al pacifismo con la violencia de la mala educación es tan torpe como horterita. Colma la ilusión ética de la Vogue. Pútrida sedicencia ética. ¿Podremos tener gobernantes con un poco de educación? ¿Qué justifica a la "quebecoi" estas malas formas y precipitación?
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