Mientras los distintos gobiernos, nacional y autonómicos, continúan manteniendo una sospechosa tibieza en la persecución de la corrupción, "España tiene 17 familias Puyol. Cada autonomía tiene su propia familia Puyol y su red político-sindical-empresarial clientelar. En la comunidad autónoma andaluza nadie sale en la foto si se mueve sin el consentimiento del Gobierno regional. El libro escrito por Agustín Rivera y titulado “El cortijo andaluz, 30 años de subvenciones, enchufismo y despilfarro” trata sobre la corrupción institucionalizada e instaurada durante los gobiernos de Chaves y Griñán. Del mismo modo, el citado libro explica los últimos casos de corrupción en Andalucía. La politización de las cajas. La trama de los falsos ERE. Invercaria. Los cursos de formación… Andalucía, la región con la tasa de paro más alta de Europa, es el paradigma de la ruina de España. Pero el fenómeno de la corrupción de los chiringuitos autonómicos se extiende, en menor o mayor medida, a todas las regiones. Bono & Barreda y su entorno empresarial del sector de la construcción en C-LM. Extremadura, una autonomía económicamente insostenible donde uno de cada tres asalariados es empleado público. La red gurteliana de Valencia y Madrid. Etc. Actualmente, han cambiado algunas caras pero el sistema sigue podrido".(Lucio A. Muñoz: PERIODISTA DIGITAL).
1 comentario:
Quitarles competencias a las Comunidades Autónomas sería algo posible si los partidos no nacionalistas se pusieran de acuerdo,pero puede ser mucho pedir en la España de los desacuerdos y personalismos.
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