jueves, 13 de noviembre de 2014

La prudencia del gobierno de Rajoy y el criterio de

proporcionalidad utilizado ante la desobediencia de la Generalidad, es una forma más de cobardía; incluso de sarcasmo, si no fuera por su torpeza y pusilanimidad. Con su grosera vista gorda, permanece reactivado el independentismo, el atropello de los derechos individuales, el desprecio del resto de constituyentes (España entera) el racismo, la xenofobia, la malversación de los fondos públicos, la corrupción, la lucha abierta contra el Estado y el odio a España desde el agusanamiento de los medios de comunicación, la enseñanza, la equivocidad y la distraída irresponsabilidad de las distintas administraciones y sus burocracias, etc.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Es así como está escrito,con meridiana claridad.Entre políticos,fiscales y jueces van dejando el camino más fácil para que la situación en Cataluña se haga invivible.En algún momento habrá que emplear la fuerza para parar a los independentistas que quieren extender las noticias de la secesión fuera de Europa,donde hay enemigos de España.(Mac).